Real reacciona y se lleva mínima ventaja a Madrid.


Real Madrid supo reponerse a la adversidad y terminó por llevarse un triunfo 2-1 de Münich. Joshua Kimmich, en complicidad con Keylor Navas, adelantó al Bayern pero los dirigidos por Zinedine Zidane lo revirtieron con tantos de Marcelo, en el final de la primera parte, y de Marco Asensio, en el comienzo de la segunda. El local, con Ribéry como figura, generó más situaciones de riesgo pero no tuvo premio.


No jugó bien, es cierto. Se vio superado en largos pasajes, no menos cierto. Pero Real Madrid siempre está. Máxime cuando se trata de instancias decisivas de UEFA Champions League, la competencia por excelencia del Merengue, y aún cuando su talismán Cristiano Ronaldo no apareció y cortó una racha de once partidos consecutivos (diez en esta temporada) convirtiendo. Logró reponerse al gol de Kimmich antes de la media hora y una vez remontado el marcador se plantó en el terreno de la resistencia para llevarse un resultado favorable al Santiago Bernabéu.

El juego comenzó con una polémica, ya que antes de los treinta segundos el juez Kuipers no vio un penal por empujón de Carvajal a Lewandowski. En dicho escenario inició mejor el Bayern Münich, aunque sintió la tempranera lesión de Robben (luego también debió marcharse tocado Jérome Boateng), por lo que Müller debió moverse del centro a la banda derecha.

De todos modos los de Heynckes no lo pudieron traducir en llegadas y posibilitaron la mejoría del Real Madrid, que contó con un disparo de Carvajal a las manos de Ulreich a los 23 minutos. Cinco más tarde, cuando parecía menguar su dominio, Bayern se adelantó en el marcador.

En una salida desde el arco y con Marcelo volcado al ataque, Joshua Kimmich encontró la calle libre sobre la derecha para proyectarse tras un pase al vacío de James Rodríguez (muy buen primer tiempo del colombiano), se internó en el área y disparó al desguarnecido primer palo de un Navas que leyó el centro al medio para Lewandowski y quedó a contrapierna.

El siguiente cuarto de hora fue del equipo bávaro: Ribéry con un centro forzó un despeje con los puños de Navas y en otra ocasión controló largo en un claro mano a mano con el arquero costarricense, Hummels le dio mordido y apenas alto en un córner y Sergio Ramos llegó a bloquear un disparo de Müller más tarde.

Real Madrid carecía de volumen de juego (Modric y Kroos no hacían pie en la zona de gestación, desaparecido Isco), el esférico no les llegaba limpio a los atacantes y sufría en defensa cada vez que Ribéry le ganaba el duelo personal a Carvajal.


Sin embargo, antes del descanso –en el minuto 44-, alcanzó la igualdad. Carvajal, desde la derecha y de cabeza, devolvió al medio una pelota que parecía inofensiva, no llegó a conectar Cristiano Ronaldo ni tampoco pudo despejar la defensa local, y Marcelo –redimiéndose de aquella siesta en el gol- concretó el suyo con un zurdazo cruzado desde el borde del área mayor. Significó el tercer tanto del lateral brasileño en la competencia. En el tiempo agregado también Navas dio la cara para tapar un cabezazo de Lewandowski.

Apenas comenzada la segunda mitad otra vez lo tuvo el Bayern con un centro bajo de Ribéry que no pudo conectar Müller entre los centrales. Y la respuesta fue un nuevo gol del Real Madrid.

En el minuto 57 una mala entrega de Rafinha en la mitad de la cancha expuso a Hummels, que quedó solo ante Lucas Vázquez y el ingresado Marco Asensio (Zidane tomó nota del bajo nivel de Isco) que, en velocidad y de banda a banda, combinaron para que el último venciera a Ulreich con preciso toque de zurda.


El conjunto bávaro siguió machacando, aunque sin resultados positivos. Dos veces lo tuvo Ribéry (de gran rendimiento) y en ambas respondió Navas. En un centro, y frente al arco, se molestaron entre sí Müller y Lewandowski. Otra vez probó suerte Ribéry desde la izquierda. Cruzado y desviado.

También se lesionó Carvajal en la visita y Zizou decidió el ingreso de Benzema, retrasándose Lucas Vázquez de la demarcación de extremo a la de lateral. El canterano y ex Espanyol rindió tanto en función ofensiva como en la defensa, conforme Ribéry comenzó a sentir el cansancio. El delantero francés, por su parte, generó la mejor chance madridista de la última media hora, aunque terminó chocando con la respuesta de Ulreich.

En el tramo final los de Zidane despreciaron la posesión del útil y terminaron resistiendo, lisa y llanamente, con Varane como elemento más destacado de su defensa. Pudo igualarlo Bayern en el minuto 88 cuando, tras un pase de Tolisso, el polaco Lewandowski quedó mano a mano con Navas pero el arquero achicó bien y el “9” definió desviado.

Fue victoria del Real, la número 150 desde que la competencia se denomina UEFA Champions League, y aunque no convenció desde el rendimiento puede resultarle decisiva en el camino a Kiev.

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